como diseñar tarjetas paso a paso x Maria Victoria Garrido-Marivi

lunes, 27 de diciembre de 2010

pesebre
















diseño Masahiro Chatani
texto y fotos http://www.encuentos.com/cuentos-de-navidad/el-pesebre-de-belen/

El pesebre de Belén.
Cuentos de Navidad para niños. Los mejores cuentos. Literatura. La mula y el buey ya estaban allí. Estaban allí antes de que llegaran José y María. Estaban allí porque lo dice la leyenda, porque la mula y el buey siempre han sido así de buenos y porque el Niño quiso que estuvieran allí para cuando Él llegara. Y además de la mula y el buey, estaban allí picoteando dos gallinas que se habían comprometido a poner a cada huevo diario allí en la paja, para que los tomara María. Había también un ratón que quería ver todo aquello, pero que se había quedado apartado y escondido para no asustar a la Virgen. No estaban los hombres pero estaban los animales. Estaban los animales para recibir al Niño, porque no tenían otra cosa mejor que hacer; estaban allí para recibir al Niño y se habían estado preparando para ello desde el día en que Dios los echó al mundo, allá por el día quinto o sexto de la creación. Que ya dijo entonces Dios, después de crearlos, que los animales eran buenos.
No estaban los hombres porque tenían otras cosas mucho más importantes que hacer: tenían que contar dinero, tenían que discutir de política, tenían que cenar, tenían que decir otra vez lo difícil que se está poniendo la vida y tenían que hacer qué sé yo qué. Los hombres no estaban para recibir al Niño, porque tenían cosas mucho más importantes que hacer. Todo esto nos lo podría contar José, que se hizo santo esa tarde llamando de puerta en puerta. En una: que "Dios les ampare"; en otra les tomaron por gitanos y fueron corriendo a ver si les faltaba alguna gallina; en otra les dijeron que "aquella era una casa honrada y que se habían equivocado, si creían que... " en otra les dijeron que tenían que llenar un impreso en una instancia del Ministerio de la Vivienda, sin olvidarse de incluir una póliza de tres sextercios; en otra le dieron a José un anuncio muy sugestivo de la Inmobiliaria Judá, S.A., que acababa de construir en Belén unas habitaciones encantadoras para matrimonios jóvenes: dos huecos hacia e monte y living con fogón bajo, exentos de tributos, con tendedero de ropa a lo largo de toda la fachada (cuerda obsequio de la empresa), céntricos, a 150 pasos de la fuente del pueblo; toda clase de facilidades de pago; entrada desde 500 denarios, y el resto en cómodas mensualidades de 50 denarios durante cuarenta y siete años.
Y José que, el mes que más ganaba, sacaba 50 denarios, y el que menos no llegaba a 30, vuelta a hacerse santo, por no haber dicho ninguna palabra arcaica referente al problema de la vivienda. Por fin llega a la cueva, José está apuradísimo porque nunca se ha visto en otra como ésta, y el pobre cree que tiene que hacer de Padre Celestial o poco menos. María, tranquila como la primera mañana del mundo, se ha recostado en un montón de hierba seca. José tiene un apuro que le parece que se va a acabar el mundo. María siente una paz como si el mundo fuera a comenzar de nuevo. El niño ha dado el primer grito. María le ha dado un beso. José ha tragado saliva. La mula ha levantado las orejas. Las gallinas que estaban dormidas en un saliente alto, han balado con mucho revuelo. El buey ha dicho "mu" y ha dado un coletazo que ha espantado todas las moscas de la comarca. Todo ha sido tan sencillo como eso. Sólo Dios puede hacer las cosas más estupendas con esa sencillez. Los únicos los ángeles que, por allí arriba, han comenzado a armar un escándalo que no van a dejar dormir al Niño. José, mira en la bolsa y tráeme los pañales. José mete su manaza en la bolsa y, después de mucho revolver, saca el pañuelo de cabeza de María y se lo lleva. No José; esto no son los pañales. Y José vuelve a meter el pañuelo y vuelve a revolver con fuerza el contenido de la bolsa, como si estuviera ablandando la cola de carpintero. Tráeme acá la bolsa, José. Y José le lleva la bolsa pensando que por ahí deberán haber empezado, mientras él se dedica a otra cosa de la que entiende bien, que es preparar un pesebre de aquellos para que sirva de cuna al Niño. Que por algo lleva él siempre en el bolso unos cuantos clavos y un pedazo de lija, por si hace falta hacer alguna chapucilla. - José ¿Quieres tenerme el Niño un momento? A José se le caen los clavos y la lija y, para limpiarse las palmas de las manos, se las frota en su propia túnica (gracias que no era de los sábados). Después toma al Niño con todo el amor y toda la emoción de que es capaz, pero casi casi con el mismo estilo con el que suele sostener los tablones en su taller. María, al verle, suelta la primera risa del Nuevo Testamento. - No, José; mira... se le agarra así. Y en esto llegaron los pastores. Traen faroles para que haya luz en la cueva; traen pieles de cordero para ponerlas en el pesebre debajo del Niño; traen leche, queso, conejos, cargas de leña, un sonajero de boj hecho a punta de navaja; traen toda la fe de Abraham, Isaac y Jacob, y toda la esperanza de Isaías, Miqueas, Zacarías y Daniel. El Niño hace pucheros, María les sonríe y José hace de "cicerone". Ellos hablan, preguntan y comentan; todos menos uno, el más viejo: un anciano arrugado y chaparrito al que todos han hecho calle para dejarle en primera fila, y que se pasa todo el tiempo mirando muy serio, sin decir esta boca es mía. La Virgen le canta el primer villancico. Los ángeles... a callarse tocan mientras canta María. Luego entran a cantar los pastores, todos a la vez y cada uno a su manera, y los ángeles se tienen que marchar porque no consiguen averiguar en qué tono cantan los pastores. El pastor viejo ni canta ni habla ni nada. Serio. A María comienza a intrigarle este hombre que parece que lleva sobre sus hombros toda la tristeza y la esperanza de Israel. Entonces María, movida de un impulso, toma al Niño del pesebre y se lo pone en los brazos del viejo pastor. El viejo siente en sus brazos algo en que habían soñado siglos de patriarcas y de profetas. Se le anima el rostro, le corre una lágrima por entre las arrugas y abre por fin la boca para decir con voz profunda algo que hubiera dicho el mismo Isaías, pero de otra manera: - ¡ ¡El Mesías; qué... ! Se cortó a tiempo y no terminó la frase. Se dio cuenta de que era lenguaje poco bíblico. Sin embargo, todos los presentes sintieron el latigazo de la emoción y entendieron muy bien todo lo inmenso que quiso decir el viejo pastor con su lenguaje de cabrero. Todos le entendieron muy bien: Los pastores, los ángeles, José y María... y, sobre todos, el Niño y el Padre que están en los cielos.
Autor: P. Pedro Iraolagoitia

martes, 21 de diciembre de 2010

santa claus











diseño Masahiro Chatani
datos tomados de wikipedia
fotos http://es.dreamstime.com/stock-foto-de-kerstman-in-schoorsteen-image3615480


El viejo Papá Noel, ilustración de un libro estadounidense del año 1855.Se cree que esto sucedió alrededor del año 1624. Cuando los inmigrantes holandeses fundaron la ciudad de Nueva Ámsterdam, más tarde llamada Nueva York, obviamente llevaron con ellos sus costumbres y mitos, entre ellos el de Sinterklaas, su patrono (cuya festividad se celebra en Holanda entre el 5 y el 6 de diciembre).

En 1809 el escritor Washington Irving, escribió una sátira, Historia de Nueva York, en la que deformó al santo holandés, Sinterklaas, en la burda pronunciación angloparlante Santa Claus. Más tarde el poeta Clement Clarke Moore, en 1823, publicó un poema donde dio cuerpo al actual mito de Santa Claus, basándose en el personaje de Irving. En ese poema se hace mención de una versión de Santa Claus, enano y delgado, como un duende; pero que regala juguetes a los niños en víspera de Navidad y que se transporta en un trineo tirado por nueve renos, incluyendo a Rudolph (Rodolfo).

Posteriormente, hacia 1863, adquirió la actual fisonomía de gordo barbudo bonachón con la que más se le conoce. Esto fue gracias al dibujante alemán Thomas Nast, quien diseñó este personaje para sus tiras navideñas en Harper's Weekly. Allí adquirió su vestimenta y se cree que su creador se basó en las vestimentas de los obispos de viejas épocas para crear este «San Nicolás», que en ese momento ya nada tenía que ver con San Nicolás de Mira.

A mediados del siglo XIX, el Santa Claus estadounidense pasó a Inglaterra y de allí a Francia, donde se fundió con Bonhomme Noël, el origen de nuestro Papá Noel, quien tenía parecido físico con Santa Claus, pero vestía de blanco con vivos dorados. Igualmente a fines del siglo XIX, a partir de un anuncio estadounidense de la Lomen Company, se crearía la tradición de que Papá Noel procedería del Polo Norte; y se popularizarían completamente los renos navideños como medio de trasporte de Santa Claus.

Luego, a comienzos del siglo XX en 1902, el libro infantil The Life and Adventures of Santa Claus de L. Frank Baum, se origina la historia de cómo Claus se ganó la inmortalidad, al igual que su título de santo.

Igualmente, ya en el siglo XX, la empresa Coca-Cola encargó al pintor Habdon Sundblom que remodelara la figura de Santa Claus/Papá Noel para hacerlo más humano y creíble. Esta versión data de 1931. En este punto, sin embargo hay que aclarar que es solo una leyenda urbana la creencia de que el color rojo y blanco de Santa Claus tenga su origen en los anuncios que la marca Coca-Cola empezó a hacer a partir de 1931, aunque sí es cierto que contribuyeron a la popularización de estos colores y del mito mismo. Hay muchas ilustraciones y descripciones casi fidedignas anteriores al anuncio como la de Thomas Nast (1869) o St. Nicholas Magazine (1926), entre otras; eso sin considerar además las antiguas representaciones religiosas del obispo San Nicolás de Mira ó San Nicolás de Bari, en las que es común el color rojo y blanco de la vestimenta religiosa, si bien es cierto que desde mediados de 1800 hasta principios de 1900 no hubo una asignación concreta al color de Santa Claus, siendo el verde uno de los más usados. Por lo tanto, se considera que la campaña masiva de Coca-Cola fue una de las principales razones por las cuales Santa Claus terminó vestído de color rojo y blanco, pero estos publicistas no fueron los primeros en representarlo con estos colores.

En cuanto a la morada de Papá Noel, como la leyenda se originó en el Hemisferio Norte, a principios del siglo XX se esparció la idea de que viviría en el Polo Norte; sin embargo igualmente hay que recordar que existen otros lugares cercanos postulados como su hogar, los cuales son: Laponia sueca, Laponia finlandesa y Groenlandia; puesto que el Polo Norte está en medio del Océano Ártico

velas navideñas-corona de adviento













diseño Masahiro Chatani
foto y datos tomaos de wikipedia


Corona de Adviento El calendario cristiano se remonta a sus propios orígenes, dos mil años atrás. Para poder ayudar a los fieles, en su mayoría dedicados a la agricultura, el calendario de la iglesia, al igual que el de los judíos, musulmanes y paganos era estacional en aquellos tiempos, combinando las fechas señaladas, celebraciones y rituales con las labores propias de sus creyentes.[1] El adviento coincide en el hemisferio norte con el invierno, con los días cortos y poco luminosos que preceden a la Navidad. El nacimiento de Cristo comenzó a celebrarse el 25 de diciembre de cada año ocupando el lugar de las saturnales y el Dies Natalis Solis Invicti, Festival del Nacimiento del Sol Inconquistado, festividad romana dedicada al Sol Invictus y vinculada al solsticio de invierno.

El anillo o corona de ramas de árbol perenne decorado con velas era un símbolo en el norte de Europa mucho antes de la llegada del cristianismo, que al igual que con otras tradiciones acabó siendo integrado en su simbología. El círculo es un símbolo universal relacionado con el ciclo ininterrumpido de las estaciones, mientras que las hojas perennes y las velas encendidas significan la persistencia de la vida en mitad del duro y oscuro invierno. Algunas fuentes sugieren que la corona, reinterpretada como un símbolo cristiano, era de uso común en la Edad Media, mientra que otras consideran que no se estableció como tradición cristiana hasta el siglo XVI en Alemania. El uso como calendario previo al día de Navidad se atribuye ampliamente a Johann Hinrich Wichern (1808-1881), un pastor protestante alemán, pionero en el trabajo misionario entre los pobres de las ciudades. Era 1839, y los niños de una escuela que Wichern había fundado preguntaban a diario si el día de Navidad había llegado. El pastor construyó un anillo de madera, hecho con una vieja rueda de carreta, con diecinueve velas rojas pequeñas y cuatro velones blancos. Encendieron una vela pequeña cada día de la semana durante el adviento, y los domingos, una de las cuatro velas grandes.

lunes, 20 de diciembre de 2010

cortina de estrellas













diseño Masahiro Chatani
datos tomados de wikipedia
fotos
http://cosascositasycosotasconmesh.blogspot.com/2010/03/latas-de-aluminio-reciclaje.html


Las cortinas son unas piezas móviles, normalmente de tela, que cubren las ventanas por el interior de los edificios. Su función es la de impedir total o parcialmente el paso de la luz y la visibilidad desde el exterior. También se pueden utilizar detrás de una puerta de acceso.

Las cortinas se colocan en cualquier habitación que disponga de ventanas, pero especialmente en los dormitorios para quitar la luz en el momento del sueño. Si son muy finas y dejan pasar la luz se denominan visillos.También, un importante detalle es que sirven para no permitir el acceso del frío, porque al momento de frías corrientes o lluvias, el vidrio(conductor) permite el enfriamiento y este pasa al ambiente bajando las temperaturas




domingo, 19 de diciembre de 2010

paloma de la paz














diseño Masahiro Chatani
datos y fotos tomados de wikipedia


En 1949, algunos años después de la Segunda Guerra Mundial, se celebra en París un multitudinario Congreso por la Paz organizado por el Movimiento mundial de los partidarios de la paz (de inspiración comunista). Picasso es miembro del Partido Comunista Francés después de la liberación, como varios intelectuales. En enero de 1949, el PCF pide a Picasso diseñar un dibujo que simbolizara el Movimiento de la Paz.

Picasso traza el perfil de una paloma, como las blancas palomas que guardan en jaulas en su taller y las de los árboles de su infancia en Málaga.

[editar] Conciencia política
Picasso declara en esta misma época: "Yo jamás he considerado la pintura como un arte de simple placer de distracción. Estos años de terrible opresión me han demostrado que yo no debía combatir solamente para mi arte sino también para mi persona".

En la primavera de ese mismo año la paloma de Picasso se fija en todos los muros de las ciudades de Europa. A consecuencia de ello, el símbolo será utilizado abundantemente en la propaganda del Movimiento de la paz. Concretamente, con el fin de ilustrar los carteles de los congresos del Consejo mundial de la paz. La contrapropaganda anticomunista de la oficina Paz y Libertad corromperá la imagen de la paloma transformándola en carro de combate soviético con el eslogan: La paloma que hace bum!

[editar] Anécdota
En la primavera de ese año, Picasso tiene una hija con Françoise Gilot que llama Paloma.